Mirada infinita, en una mirada perdida, Santiago se sentía sin recuerdos, sin memorias de ese ayer, porque la enfermedad del olvido, se había depositado en la cabeza, desde hacía unos años, todo fue un detonante, la muerte de Sacra, su esposa, la muerte en accidente de su hijo Jaume, y la enfermedad de su nieto Darío parece que ese cúmulo de desgracias lo llevaran a una soledad, a una depresión, que eliminó sus recuerdos, sus días de aquel ayer, la vida de Santiago, fue de aventuras, de riesgos, de fiestas, de jugar sus partidas en el casino de la ciudad, de amor, de enamorarse una y mil veces de la vida, pero el sueño se hizo de otra realidad, ya no volvió a ser el mismo, y esa mirada de picardía que siempre tuvo se volvió triste, con esa cabeza cabizbaja, con ese devenir de otros sentidos, Santiago pasó a ser un perdedor en ese nuevo camino de su vida, en su tristeza de otra inspiración...Feliz martes para los familiares y amigos de enfermos de Alzheimer.
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