De nombre Fede, era el hermano de nuestra vecina y amiga Tere, un hombre con una elegancia particular, su esposa Conchita, padres de cuatro hijos, y abuelos de varios nietos, Fede, era deportista, atractivo, juvenil, vestía con una clase muy especial, era abogado en su bufete junto a su hijo del mismo nombre, con él se podía dialogar de todo, era una filosofía andante, las tardes de domingo, paseaba con otra pareja de amigos, y entraban a unas de las cafeterías de la ciudad, gozaban de las reuniones de la familia, con sus hijos, nietos, y su hermana Tere, eran esos tiempos de la mesa camilla, de los reencuentros, de el valor de la positividad hacía las cosas, muchos años después, Fede comenzó con los pequeños olvidos, con la desorientación, la pérdida de control, el doctor, el diagnóstico, Alzheimer, la fase de Fede, fue muy desagradable, hasta que terminó sus días, en ese centro, con ese cariño de sus hijos y nietos, cuando le iban a visitar, hoy su esposa, Conchita, pasea por las calles de la ciudad, con ese recuerdo para su Fede...Feliz fin de semana para los familiares y amigos de enfermos de Alzheimer.
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