AQUELLA DULZURA DE SOLEDAD...

Aquella dulzura de Soledad, llegó a mi alma de inmediato, ella escribía poesía, y refugiaba sus miedos, plasmando, ideando, compartía su vida con Amanda, el amor de las dos, era profundo, instantáneo, de hace muchos años, eran dos personas adelantadas a su tiempo en los tiempos de la posguerra y ya entonces vivieron un amor libre, los años nunca suelen perdonar, a punto de llegar a los ochenta, Soledad sufrió una caída, y fue ese principio del final, la enfermedad del olvido, se cebó en ella, y la caída a los infiernos, fue el detonante, hace unos días que murió y ya solo me queda el recuerdo de esa Soledad, llena de magia y misterio... Feliz día de miércoles para los familiares y amigos de enfermos de Alzheimer.